
Se termina enero y parece que muchos todavía están dando la bienvenida al nuevo año. "Faltan los tamales", dicen algunos. Pero ¿y los nuevos planes y propósitos para 2025? ¿Dónde quedaron?
Si estás por comenzar con tus propósitos o ya lo hiciste, deja que te presente estos cinco buenos propósitos financieros que pueden ser diseñados, planificados y ejecutados desde hoy.
¿Quieres conocerlos?
Haz tu presupuesto mensual y anual
Un presupuesto mensual y anual es como tener un GPS de tus finanzas personales porque te ayuda a tener control de los ingresos y gastos; a mirar hacia adelante y planificar tu futuro financiero.
Con él puedes analizar tus hábitos de consumo, identificar gastos necesarios y evitar los innecesarios. Por otra parte, te permite conocer tu capacidad de endeudamiento y proteger así tu salud financiera.
También puedes identificar tus posibilidades de ahorrar e invertir para construir o consolidar tu patrimonio familiar.
Planifica para reducir o eliminar deudas
Para que las finanzas personales estén bajo control, es conveniente dedicar una parte de los ingresos a pagar las deudas.
Depende de las circunstancias personales, pero los expertos recomiendan no endeudarse nunca por encima del 35% del monto que resulte de restar tus gastos a tus ingresos.
Entonces como un buen propósito puedes planificar la reducción y eliminación de deudas.
Ahorra en un fondo de emergencia
Ten un fondo de ahorro para imprevistos, como podría ser un gasto de salud inesperado o cualquier otro gasto no planificado. Este fondo debe cubrir entre tres y seis meses de gastos.
Un fondo de emergencia es vital para evitar deudas o pagar intereses innecesarios en caso de imprevistos.
Busca que tu fondo esté en una cuenta que te genere intereses por encima de la inflación y que te brinde liquidez inmediata.
Hay algunas opciones en el mercado financiero que te permitirán hacerlo, incluso que puedes programar como ahorro recurrente para facilitar su creación y mantenimiento.
Obtén los seguros necesarios para proteger tu economía familiar
Ahorrar es esencial, pero también debemos gestionar los riesgos de la vida para proteger nuestro capital.
Eventos como una enfermedad, un fallecimiento o invalidez pueden afectar nuestro patrimonio y causar pérdidas irreparables.
Para estos riesgos, debemos tener los seguros necesarios y adecuados para proteger nuestro patrimonio.
Los tres seguros básicos que yo te recomiendo: seguros de Gastos Médicos Mayores, Vida y Retiro.
De acuerdo a tu etapa de vida ¿cuáles recomiendo como básicos?:
Seguro de Gastos Médicos Mayores te proporciona una cobertura adecuada ante eventualidades como accidentes o enfermedades.
Seguro de Vida, diseñado para asegurar la estabilidad económica de tu familia en casos de fallecimiento, muerte accidental o invalidez total y permanente.
Seguro de Ahorro para el Retiro, que en tu vejez te asegurará un ingreso adicional a tu Afore. Como es un seguro si llegas a fallecer antes del retiro, heredas tranquilidad a tu familia. O si sufres una invalidez total y permanente, la aseguradora sigue cubriendo las primas de tu seguro para que cuentes con recursos económicos en tu retiro.
Invierte para tu futuro
Si ahorrar suma, invertir multiplica. Es la mejor manera para evitar que nuestros ahorros pierdan valor frente a factores económicos como la inflación.
La estrategia debe estar diseñada a mediano y largo plazo para aumentar el patrimonio futuro.
Si eres inversionista es importante mantenerte informado de las noticias económicas y las tendencias del mercado.
Antes de invertir hay que conocer tu perfil como inversionistas, para elegir el esquema que mejor se adapte a tus objetivos y capacidades financieras.
Toda inversión conlleva riesgos, va a depender de la cantidad, el plazo y la volatilidad que estés dispuesto a aceptar.
También es importante diversificar entre acciones, bonos, bienes raíces u otros activos según tu perfil de riesgo, siempre asesorado por profesionales.
¿Con qué propósitos vas a empezar tu 2025?
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